Nuevebits

Jugando a… Annihilation!

Nuevo pack de mapas de Black Ops, último título de una saga que, sin saber bien por qué, no dejo de jugar; en serio, es un puto vicio y no me lo acabo de explicar. Con Annihilation nos llegan 4 mapas más uno de zombies que si bien son caros (eso es indiscutible) a mí han conseguido volver a ponerme a los mandos del título.

De estos hay a patadas en este “Aniquilación”

La llegada de un nuevo packs de mapas de esta saga bélica siempre trae consigo polémica. Para empezar son carísimos y por encima, TreyArch insiste en que comprendamos que nos saben hacer mapas y que tienen que mejorar; pero claro, mapas nuevos tienen que salir y, sinceramente, si yo fuera Activision también los pondría igual de caros, es una venta tan segura como vender cigarrillos a la puerta de un colegio; sabes que son malos para los críos y que no deberías pero ¡Dinero, dinero!

Con eso, descargamos el pack; un pack tocho de cojones por otra parte que me tuvo un día largo descargando sin parar y nos encontramos con cuatro mapas más uno de zombies. Yo jugando a zombis soy malísimo; algo que he de corregir algún día y centor casi toda mi experiencia call of duty en los modos dominios, captura la bandera y cuarteles. Primera cosa que no me ha gustado, en estos mapas nuevos no puedes jugar a todos los modos de juego que al resto de mapas. Al menos sí tengo dominio, modo que, por otra parte, más pone en evidencia los defectos de los mapas (Watch out! Sniper!)

Dominio sitúa tres banderas a dominar en el mapa. Los jugadores de los equipos han de sentarse a su lado durante un ratito para que pase a formar parte de su equipo y la partida se hace más o menos entretenida en función de la relación entre accesibilidad a la bandera-zonas para guardarla-accesos para joder a los que la guardan. Si alguno de estos factores está en desequilibrio la experiencia se vuelve regulera (¡Pues juega a otro modo, Mugen! … -Joer, es que dominio mola).

Hazard, el primero de los mapas que comentaré es un mapa con diseño de cacahuete: un gran pasillo anchote con mucho espacio en sus partes finales. Las banderas en dominio, por lo tanto, se ponen en cada extremo y en el centro y dominar la posición central es un maldito infierno ¿por qué? porque hay demasiado espacio libre y acabas, seas sniper o no, disparando desde lejos. El mapa te obliga a buscar los rincones y los pasillos laterales del cacahuete para poder llegar a los snipers (que aquí, todos somos snipers) y matarlos para poder hacer algo; pero ¿qué ocurre? que los capullos vuelven a la vida antes de que tú puedas ir a por la bandera “b” (la central), un asunto complicado. El tan extraño diseño de esta fase, recuerda mucho a otra que jugué en World at War. A Treyarch le molan los cacahuetes pese a que no dejen demasiadas posibilidades jugables: o eres francotirador o te dedicas a flanquearlos y matarlos. Hay que conocerse el mapita, sufrirlo unas cuantas veces antes de empezar a quererlo. Sí, como ese hijo feo al que no puedes dejar de querer.

La ardilla nos enseña cómo ser unos máquinas en Hazard

Silo y Drive In son bastante mejores, sobre todo el primero: laberíntico, con muchas esquinas, los lugares justos para que te toquen los huevos los francotiradores (el cáncer de estos títulos si no lo eres tú, entonces molan) y bastante bien de tamaño. De todas formas, Drive In vuelve a tener el problema de la dichosa bandera b, en los puntos centrales hay muchísimos puntos a distintas alturas para los francotiradores, casi en los cuatro puntos cardinales puedes encontrarte a un capullo con su mirilla con zoom; que conste que comprendo que siempre tiene que existir una posición jodida de tomar peeeero ¡Venga ya! Os diré que más de una partida en dominio ha finalizado en tablas, cada uno con una bandera tomada y la del medio sin dueño (tan solita y necesitada de cariño…). Silo, para mí es la mejor dentro del pack, te deja hacer cositas y es bastante equilibrada.

Hangar 18 es un mapa muy confuso, demasiados puntos altos, demasiadas esquinas, demasiadas alturas ¿La bandera b? ¡Buf! Una sangría de disparos a la cabeza, emboscadas por los lados y muerte por doquier. Comienza la partida, cada uno se hace con una bandera (la “a” y la “c”) y luego a subirse a los tres puntos elevados que miran a la bandera b. Claro está que todo esto mejora en los otros modos pero al ser “dominio” la manera perfecta de percatarse de las cagadas de los mapas, a ellos me remito.

En definitiva, a lo que a mapas multijugador se requiere, queda como conclusión que son muy poco flexibles, muy destinados a una decisión obvia: ¡Me hago francotirador!, con lo que la jugabilidad se resiente, ya que o eres uno de ellos o te dedicas a matarlos; no es que sea malo, es que es un tanto limitativo y te sentirás tonto disparando tantas veces tan a lo lejos en lugar de tener esos encuentros tan molones tras cada esquina. Quizás la cosa habría estado mejor si se permitiera mezclar estos mapas con el resto en lugar de tener que decidir si jugar con estos cuatro o con el resto de los originales; porque la manera de enfrentarse a Annihilation es muy marcada ¿Mi conclusión? Si ves el precio de 14.99 euros y crees que lo amortizarás, cómpratelo, porque matar snipers a granadazos también es satisfactorio y por muchos defectos que tenga, hoy me echaré unas partidas sí o sí, como llevo haciendo todo el fin de semana.

Sobre el mapa de zombies, os descubriré que mi opinión es tan inútil como poner a un FIFERO a analizar los pros y los contras de la versión arcade de Super Street Fighter VI AE. A mí me ha gustado, pero tengo un colegui de nombre Branchiito que tiene unas sabias palabras sobre él en nomáshype.com, yo os diría que hay unos zombis nuevos que me matan todavía más rápido que los del juego original; pero qué queréis que os diga, cada vez que me meto en una partida de Left 4 Dead 2 en PC… me echan… sniff…