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Érase una vez toda una legión de jugones que pasaban sus horas delante de pequeños monitores de 256 colores, jugadores que disfrutaban de grandes joyas como: The Dig, Monkey Island o The Day of the Tentacle; y se preguntarán ustedes ¿qué género podía absorber a toda esta gente?Sí,  amigos míos, el de las aventuras gráficas.

Heavy Rain intenta reavivar un género en decadencia que aún coletea gracias al Steam y las reediciones de juegos como el ya nombrado Monkey Island. Si los chicos de Quantic Dream se lanzan a esta superproducción con tan poca representación en las videoconsolas de la actualidad, es porque ya han demostrado que saben lo que se hacen y que lo hacen muy bien.

Los creadores de Fahrenheit y Omikron: The Nomad Soul nos enseñaron a todos los jugadores de la vieja guardia que con talento y buenas ideas, los géneros olvidados pueden renacer, renovarse y convertirse en imprescindibles. Pero vayamos a lo que nos ocupa y preguntémonos, ¿qué tiene este Heavy Rain que tanta expectación crea?

En la actualidad, no tendría cabida comercial el lanzamiento de una aventura gráfica como las de antes por su lento desarrollo basado en recogida y uso de objetos, por la completa carencia de momentos de acción y por contar con historias lineales sin subtramas ni variedad en el desarrollo. Esta estructura tan necesitada de adrenalina, emoción, fluidez, inmersión y diversión directa, podría no sería bien recibida por el nuevo usuario de 2010, por muy grande y épica que fueran las historias a contar.

En Quantic Dream saben todo esto, y lo aplican. No soy capaz de quitarme de la cabeza lo que en su día declaró el señor David Cage "En Heavy Rain jugamos una historia, la cambiamos, la retorcemos, la descubrimos. Es única, y es tuya... En mi mente ya no es un videojuego, pero sin embargo es totalmente interactivo. Si tiene éxito habría que pensar en otro nombre para este tipo de experiencias." En pocas palabras, Heavy Rain es la evolución natural de las aventuras gráficas.

Los thrillers psicológicos y las series cargadas de investigación de estos últimos años, son la fuente de inspiración para la historia de este juego. Resulta imposible no comparar cada escena o momento del mismo con algo ya visto en el cine o en la tele. Esto no quiere decir que estemos frente a un plagio o algo carente de ideas, ni mucho menos, sino que transmite la sensación de estar jugando tu propia película. Reconoces el cordón policial, el desguace, la sala de fiestas, la comisaría; pero en esta ocasión, también lo vives e interactúas con lo que te rodea. Para no desvelar nada, sólo deciros que son 4 los personajes controlables a lo largo del juego, cada uno con su historia y punto de vista de los acontecimientos. Si alguien ha visto la película En el punto de mira, podrá hacerse a la idea de lo que es contar una historia a cuatro bandas sin con ello perder la emoción o la intriga del hilo argumental. Los cuatro personajes están involucrados de formas distintas a un psicokiller apodado el asesino del origami, con respecto a las actuaciones del asesino y la historia que le rodea, poco o nada se sabe, pero de eso se trata, de no desvelar nada hasta jugarlo.

Madison Page (periodista), Ethan Mars (padre de familia), Norman Jayden (agente del FBI) y Scott Shelby (investigador privado), son los personajes controlables a lo largo del juego, cada uno por su situación o profesión contará con medios más o menos aptos para la investigación. Mientras que Norman tiene a su disposición los recursos del FBI y la última tecnología para la búsqueda de pistas en los diferentes escenarios, Madison sólo puede aportar su encanto y su ingenio para avanzar en el desarrollo. Aunque a primera vista pueda parecer más atractivo jugar con Norman Jayden, su adicción a ciertos “fármacos”, que  no le dejan pensar con claridad en ocasiones y altera sus condiciones físicas, le obliga a deshacerse del mono si desea continuar sin contratiempos. Imagínate lo peligroso de la situación cuando, en medio de un tiroteo, necesites de la sustancia en cuestión.

A la hora de jugar, Heavy Rain compagina elementos clásicos con algunos más modernos y bastante vistosos. La labor conversacional con el resto de personajes de la historia es profunda, ya sea para sonsacar información, interrogar a un sospechoso o persuadir al matón de turno. Lo han llevado a un nuevo nivel con la inclusión de factores como el miedo, el cansancio o el síndrome de abstinencia a la conversación. Si por algún motivo estamos aterrados, los textos aparecerán de forma borrosa y rápida, éste y otros efectos ayudarán a  hacernos sentir las emociones que rondan a los personajes durante las conversaciones.

Con respecto a los momentos de acción, los Quick Time Events se llevan el premio. Antes que nadie ponga el grito en el cielo, deciros que pocos juegos han sabido implementar este sistema tan bien como en Heavy Rain; aunque abundantes, no son nada pesados, más bien le aportan el dinamismo necesario al juego para conseguir la adrenalina y la tensión que la historia necesita. Algo a destacar es la no necesaria muerte del personaje por errar durante los QTE, aunque en el supuesto de cometer varios errores consecutivos, la situación sí puede llegar a tragedia. Con esto no se busca facilitar el juego, sino poder observar tus errores durante los momentos de acción sin que ellos sean fatales. Si en el transcurso de los enfrenamientos resultas herido, puede provocar que más adelante no puedas llevar a cabo las acciones que sí podrías si te encontraras en plenitud de condiciones, increíble.

De todo lo bueno que presenta el título, me gustaría destacar lo que más me ha impresionado y eso señores, es la ambientación. Muchos juegos han disfrutado de grandes personajes con grandes historias que no han llegado a cuajar por falta de un entorno que les respalde, un claro y actual ejemplo para mí sería Morrigan de Dragons Age: Origins. Todo un carácter con ideas bastante especiales y un pasado un tanto turbio e interesante, de nada sirve si a la hora de situarse en la historia sólo gira alrededor de un protagonista que ni habla o pasea por bosques sin fauna o ciudades sin población, o sea, que no se complementa algo tan bien definido con un entorno falto de vida. Todo tiene que estar equilibrado, si quieres transmitir, la clave siempre será el personaje, pero el mundo que le rodea tiene que hablar con la misma fuerza que sus acciones; sería como tener a un Predator en la película de Bambi. Sólo tenéis que visualizar una imagen del juego o un video para que entendáis de lo que os hablo, una maravilla.

Para terminar con este avance, no puedo dejar de lado la gran labor de localización del título para los diferentes territorios, incluido el castellano, con un doblaje con actores de primera, de veras que se aprecia la labor. Una completísima edición especial con cantidad de extras muy jugosos, pero por desgracia para todos, también Quantic Dream se ha apuntado a la moda de los DLC… chicos malos. En la salida del título “incompleto” ya tendremos a nuestra disposición contenido descargable de pago.

¿Qué más os puedo decir? Ya estoy impaciente por la llegada de Febrero, mi señora, mis gatitos y yo vamos a vivir como nunca un videojuego.

Primera impresión:

Pobre     Normal    Interesante      Prometedor     Futura obra maestra